¡Orfeo has venido por mi !
mientras se acercaba a el, Orfeo pudo percibir el perfume dulce de las flores que aun tenían sus cabellos.
- Euridice puede volver contigo- dijo Plutón, el rey de los muertos- pero con solo una condición que no voltees a mirarla durante tu viaje de regreso. Debes confiar de que te estará siguiendo. Hasta tanto ambas no se encuentre en la tierra no debes mirar hacia atrás, o tu viaje habrá sido en vano.
Orfeo acepto satisfecho una condición que parecía muy sencilla.
Con la determinación de no mirar hacia atrás dejo que su esposa pasara por al lado de furias por pasajes poblados de espectros y fantasmas Orfeo anhelo poder mirar hacia atrás para confirmar que Euridice estuviera bien, pero contuvo su deseo.
Por ultimo, después de que el barquero lo hubo conducido a través del lóbrego rió estigio, Orfeo diviso un raudal de luz que penetraba por la puerta del averno. espero hasta haber salido de la caverna de la muerte y luego se dio vuelta para mirar a Euridice.
Sin embargo Orfeo olvido que para obedecer la advertencia de Plutón ambos Debian estar afuera del averno antes de que el pudiera mirarla de nuevo; entonces, en cuanto sus ojos se posaron el la dulce de Euridice, esta profirió un "adiós" y luego desapareció en el negro abismo...